Los científicos de la Universidad de Granada han comprobado que la leche de
cabra contiene muchos nutrientes que la hacen comparable a la leche materna,
como ocurre con la caseína.
La leche de cabra contiene menos caseína del tipo alfa s1, que es la
responsable de la mayoría de las alergias a la leche de vaca. La leche de cabra
es hipoalergénica y en muchos países es utilizada como base para la elaboración
de leches maternizadas en sustitución a la leche de vaca.